Moto, trampa y confesión: el escándalo en la casa de Gran Hermano que benefició a Catalina
Lo que comenzó como una noche de festejo en la casa más famosa del país terminó convirtiéndose en un verdadero escándalo. El lunes, la gala de Gran Hermano 2025 prometía emoción, premios y estrategia. Pero lo que nadie esperaba era que la moto, ese codiciado objeto de deseo, pasara de símbolo de victoria a estandarte del fraude.
Gabriela Gianatassio, la brasileña flamante ganadora del desafío por la moto y del liderazgo semanal, pasó del podio al paredón en tiempo récord.
La razón: hizo trampa. Y lo admitió. Todo comenzó con una sospecha: Tato Algorta, el uruguayo, notó algo raro en la final de la trivia. Según él, Gabriela miraba demasiado a Ulises antes de responder. Una ceja levantada, una mirada fugaz y pausas sospechosas.
Al principio, “el Big” le restó importancia. Gabriela había ganado “en buena ley”, dijeron. Pero los fanáticos en redes sociales, no tardaron en hacer justicia con memes, clips y acusaciones virales. La producción no tuvo más remedio que revisar las cámaras.
Y lo que vieron fue más elocuente que cualquier testimonio: sí, hubo miradas. Sí, hubo señales. Sí, Ulises la ayudó. Fue entonces cuando Gabriela, acorralada en el confesionario, lo admitió: “Voy a ser sincera. Ulises me ayudó en algunas”.
Gabriela fue sancionada. Ulises también fue sancionado y ambos quedaron automáticamente nominados. Como si eso fuera poco, la fulminante que Gabriela había lanzado con orgullo se anuló, y la producción decidió repetir la competencia.
El martes por la noche, el desafío renació entre nervios y expectativas, con nuevos finalistas: Tato, Lucía, Selva, Juan Pablo y Catalina. Esta vez no hubo trampa, ni miradas cómplices, ni gestos sospechosos. Solo una llave, la número 13, y una pediatra decidida: Cata se quedó con la moto y con el liderazgo.
¿Y a quién fulminó la nueva líder? A Luz Tito, claro. “No me cabe en la casa y su cero empatía”, lanzó sin anestesia. La misma fulminante que Gabriela había intentado y que ahora volvió a caer, como una especie de karma televisivo. Así, Luz, Gabriela y Ulises quedaron en placa.
