La historia de los aborígenes que vivieron en el Museo de La Plata: “Estaban en un subsuelo”

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Esta historia tiene como protagonistas a un grupo de aborígenes y al primer director del Museo de Ciencias Naturales de La Plata, Francisco Josué Pascasio Moreno.

El Perito Moreno (director) trajo a varios aborígenes para que vivieran allí, cuando aún estaba en construcción. Fueron alrededor de 12 personas que vivieron y murieron adentro, quienes después fueron exhibidos y años más tarde, restituidos.

Uno de ellos era el Cacique Inacayal (FOTO), uno de los más importantes de la década de 1880. Este cacique y Moreno ya se conocían desde antes de llegar a la ciudad de las diagonales. Cuando Moreno era joven, antes de la fundación de La Plata, había hecho un viaje a la Patagonia, cerca de Bariloche y fue tomado como prisionero. Inacayal lo ayudó a escapar.

En 1884, cuando comenzó la Campaña del Desierto, el cacique fue tomado prisionero y llevado a la Isla Martín García. Cuando el director del Museo de La Plata, ya en funciones, se enteró decidió ir a buscarlo para trasladarlo al edificio público platense y pasaban sus días haciendo tareas de limpieza o para la construcción.

No eran libres, estaban encerrados. Por la noche vivían en un subsuelo todos juntos y durante el día a veces se les pedía posar para los investigadores y científicos que venían a analizarlos. Este traslado ocurrió en 1886, dos años después de ser capturado. Para el año siguiente, entre septiembre y octubre, fallecen en un lapso de tres semanas cinco aborígenes.

Nunca se supo cómo murieron. En ese entonces, al morir solo los descarnaban cuando se iban, preparaban sus cuerpos y los exhibían. En las crónicas periodísticas se dice que los enterraron en el Paseo del Bosque. El cuerpo del cacique Inacayal fue exhibido en el Museo hasta la década del 40’ y toda su familia también falleció allí.

Respecto a las razones de la muerte de Inacayal, hay quienes dicen que fue tras la muerte de su hija de siete años y se sospecha que pudo haber sido de tristeza. Tres días después de la partida del cacique, también murió su esposa.

El Museo de La Plata aún conserva una gran cantidad de restos humanos de integrantes de distintos pueblos originarios, aunque los mismos no pueden ser exhibidos por una ley aprobada en 2010.

 

CON INFORMACIÓN DE:

DOCUMENTAL – “Imágenes encontradas: Las expediciones científicas del Museo de La Plata.

DIARIO ELDÍA

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